Kari B. ocupó puestos gerenciales en tres compañías diferentes que integran la lista de Fortune 500 durante 14 años antes de incorporarse a Kimberly-Clark en 2022, y siente que finalmente encontró su hogar corporativo.

“Me propuse trasladarme a una compañía que se alineara mejor con mis valores y en la que pudiera establecerme a largo plazo, y aquí estoy”, dice Kari. “Quiero generar un gran impacto dentro y fuera de Kimberly-Clark”.

La vivaz ejecutiva es directora de desarrollo de clientes en nuestro nuevo Centro comercial de Chicago y experta en ventas y gestión de cuentas.

Kari encaja tan bien en la cultura cálida y ambiciosa de Kimberly-Clark que sus colegas con frecuencia le dicen que parece que lleva allí más tiempo del que realmente lleva.

Esto es un motivo de orgullo para Kari, quien lo atribuye a los valores y a la cultura solidaria de la compañía.

“Hay muchas personas de las que aprender y, debido a que nuestra cultura prioriza a las personas, estas están más que dispuestas a dedicar tiempo e invertir en usted”, dice.

Kari lo retribuye aplicando sus sólidas habilidades de liderazgo al desarrollo de las personas de su equipo y estando pendiente de su cuenta, una cadena nacional de farmacias.

“Creo firmemente que si, como líder, doy prioridad a nuestras formas de trabajar: desarrollar a nuestra gente, se sientan las bases para que prosperen, lo que a su vez desarrolla nuestro negocio”, señala.

Su personal está en sintonía con la cadena y sus consumidores, así como con la competencia, expresa. No son tímidos cuando se trata de pedirles a los equipos relacionados de Kimberly-Clark que proporcionen lo que necesitan para destacarse.

“Este tipo de colaboración y fricción saludable a menudo da lugar a nuevos productos, diferentes tácticas y campañas promocionales y mucho más”, afirma Kari.

Kari es una fuerte defensora de la diversidad, la equidad y la inclusión y fue honrada dos veces por su empleador anterior por sus contribuciones.

Kari considera que Kimberly-Clark “hace todo lo posible” para proporcionar un entorno inclusivo. El hecho de que su jefe inicie cada reunión con un miembro del equipo compartiendo algo sobre la inclusión, una historia o un consejo, es un ejemplo del enfoque proactivo de la compañía.

“Kimberly-Clark se preocupa por todas las personas, por lo que confío en que seguiremos progresando en este espacio”, indica Kari.

Ella tiene previsto hacer su parte para mejorar la organización para los empleados, clientes y consumidores involucrándose de manera activa en los grupos de recursos para empleados (Employee Resource Group, ERG) de Kimberly-Clark, como la Red de Empleados de Ascendencia Africana y la Red de Inclusión de Mujeres, así como la comunidad de Chicago.

El propósito de Kimberly-Clark de un mejor cuidado para un mundo mejor tiene un significado particular para ella, en parte porque le recuerda a su cita favorita de Maya Angelou que guía su accionar: “Hazlo lo mejor que puedas hasta que sepas más. Cuando sepas más, hazlo mejor”.

“Para mí, un mejor cuidado para un mundo mejor significa mantenerse curioso y abierto a nuevas y mejores formas, siempre buscando una mejor manera de hacer algo y luego poniéndola en práctica”, expresa Kari. “También significa responsabilizarnos ante los consumidores y empleados de Kimberly-Clark para liderar de forma cuidadosa siempre y en todos los sentidos”.