Kathryn M. valora las oportunidades que ha tenido en Kimberly-Clark y lidera una iniciativa para promover a otras mujeres en todos los roles de fabricación de la compañía.

“Estoy muy motivado por la inclusión y la diversidad de Kimberly-Clark (el compromiso con estos aspectos)”, señala Kathryn, quien se unió a la compañía en 2001 y actualmente se desempeña como directora de Compras para Europa, Oriente Medio y África.

“Durante mi tiempo en K-C, he visto avances significativos en nuestra cultura para garantizar que se fomenten los equipos diversos y que el valor que las mujeres aportan a los equipos sea bien comprendido y activamente alentado”.

Kathryn participa en la Red de Inclusión de Mujeres, un grupo de recursos para empleados que promueve el crecimiento profesional de las mujeres.

“La Red de Inclusión de Mujeres brinda oportunidades para participar en temas relevantes para las mujeres en el lugar de trabajo y he podido construir relaciones útiles con otras mujeres”, señala. “Además, existe una cultura realmente amable en la que las mujeres habitualmente se comunican con otras mujeres para apoyarlas y alentarlas, especialmente cuando son nuevas en un equipo o se enfrentan a un problema particularmente desafiante”.

Su creencia en Kimberly-Clark ayuda a impulsar su dedicación para ayudar a otros a tener éxito.

“Kimberly-Clark es un gran empleador que ofrece fantásticas oportunidades profesionales”, menciona con entusiasmo. “Ten confianza en tus habilidades y enfócate en lo que puedes aportar a un rol en lugar de preocuparte por cumplir con cada elemento de la especificación del rol”.

Kathryn es una persona carismática, por lo que abandonó su carrera en química nuclear para trabajar en un campo comercial. En Kimberly-Clark, subió constantemente en Compras a través de puestos con diversas responsabilidades de categoría, de regiones y a nivel global.

Sin embargo, fue su ascenso de 2015 a gerente de planta en una fábrica global de tampones en República Checa lo que ella menciona como el hito clave.

“Marco Q., vicepresidente de Cadena de Suministro de Europa, Oriente Medio y África, se arriesgó conmigo como gerente de la fábrica cuando no tenía experiencia previa en fabricación”, explica Kathryn. “Fue un cambio de juego para mí en términos de desarrollo personal y profesional, y me permitió verme como líder fuerte capaz de aportar valor a cualquier función comercial”.

Ahora, tiene la tarea de garantizar que el abastecimiento proporcione resultados óptimos para cada una de las innumerables unidades de negocios y mercados que respalda Europa, Oriente Medio y África, lo que definitivamente la mantiene alerta y preparada.

“Hay mucha diversidad en toda nuestra región con mercados que varían desde recientes hasta muy antiguos”, reflexiona. “Cada uno tiene sus propios desafíos y debemos mantenernos ágiles para asegurarnos de evolucionar con entornos externos e internos cambiantes”.

Kathryn, que tiene una licenciatura y una maestría en química nuclear de la Universidad de Oxford, lo gestiona todo a través del ingenio y la colaboración.

“Soy creativa en la resolución de problemas y tengo un enfoque muy fuerte en el desarrollo de las personas, lo que significa que tengo un equipo fabuloso conmigo a medida que avanzamos en cada desafío”, señala.

La pandemia de la Covid-19 ciertamente ha aumentado la complejidad de su trabajo y ella ha trabajado arduamente para asegurarse de que su equipo se sintiera conectado, apoyado y apreciado durante períodos prolongados de confinamiento y trabajo remoto.

Kathryn alivia el estrés corriendo carreras con un club y también corrió maratones para recaudar dinero para un hospicio local.

Además, se relaja paseando a sus perros con su pareja, James, y mirando a sus hijos, David y Helen, practicar deportes en equipo.