Los productos esenciales de Kimberly-Clark se fabrican en todo el mundo con máquinas altamente especializadas, algunas del tamaño de un campo de fútbol.

Adam, maquinista de control numérico por ordenador (Computer Numerical Control,CNC) en Kimtech™, que diseña y construye el equipo de fabricación que produce Kleenex®, Scott®, Huggies® y otras marcas globales de Kimberly-Clark, desempeña un papel clave para mantener el equipo en funcionamiento las 24 horas al día, los 7 días a la semana. Su personalidad desenfadada y acogedora contribuye a que esta tarea parezca fácil.

Su equipo en Neenah, Wisconsin, EE. UU., fabrica piezas y repuestos para esas máquinas. Adam llegó a Kimtech™ después de servir en el ejército de los EE. UU. en artillería de campaña y comunicaciones por satélite, trabajando en fábricas y obteniendo un título asociado en mecanizado CNC.

“Volví a Neenah y solicité trabajo en Kimtech™ por recomendación de un familiar”, explica. “Llevo aquí casi cinco años y nunca he sido tan feliz en una carrera”.

“No he encontrado un lugar donde haya disfrutado tanto trabajar como aquí”, cuenta Adam. “Todo el mundo se lleva bien y cuida de los demás. Parece un grupo cercano de amigos o una familia”.

De vez en cuando, la gente de su turno coordina una comida para compartir en la que todos aportan algo a la comida compartida durante su tiempo de descanso, señala. También socializa con algunos de sus compañeros fuera del trabajo.

Además de la camaradería, Adam aprecia la consideración de la dirección hacia el personal.

“Cuando la vida en casa se complica, me dan la posibilidad de flexibilizar mi horario sin consecuencias negativas”, dice. “Cualquier problema fuera del trabajo se aborda con un sentido de comprensión y la voluntad de trabajar contigo para ayudarte a superarlo de la forma más rápida y segura posible”.

Le gusta haber podido formarse también en una gran variedad de equipos en las instalaciones, donde la seguridad es siempre la máxima prioridad.

“Los maquinistas tienden a buscar la perfección”, reflexiona Adam. “Intentamos fabricar el producto de mejor calidad que podemos, y creo que eso encaja bien con los valores de Kimberly-Clark y su (propósito) de lograr una mejor atención para un mundo mejor”.

También ha tenido la oportunidad de aprender nuevas técnicas, como la programación CNC y varios tipos de mecanizado.

“Intentamos superarnos con más conocimientos y ampliar nuestras habilidades”, señala Adam. “A veces la tarea que tenemos entre manos parece imposible, pero la hacemos y mantenemos todo en funcionamiento”.